Cualquiera de las empresas de desatascos en Navarra en algún momento de su trabajo ha tenido que utilizar la sosa cáustica para poder llevar un trabajo a término. La sosa es uno de los remedios más eficaces para eliminar atascos en tuberías, es un potente corrosivo que deshace en segundos materiales orgánicos e inorgánicos. Sin embargo, esta gran virtud es también un gran problema.
Las empresas de desatascos en Navarra saben bien de este problema, dado que al ser tan potente, puede dañar las tuberías que estamos desatascando con la misma facilidad que deshace el atasco. El aluminio, por ejemplo, llegará a romperse si se usa sobre él de modo continuado.
Además, la sosa puede ser el generador de los atascos, puesto que usada en cantidades excesivas puede cristalizar dentro de la tubería, lo que irremediablemente generará un tapón aún mayor; puesto que el atasco que ya teníamos se verá reforzado con el nuevo material que no nos permitirá eliminarlo fácilmente.
Pero incluso la sosa es perjudicial para el ser humano si no se usa adecuadamente; no deja de ser un potente corrosivo que podría provocar quemaduras e irritaciones de considerable importancia.
Debemos manejar siempre este producto atendiendo con precisión las instrucciones de uso, usar guantes para manipularlo y a ser posible gafas y mascarillas protectoras para evitar respirar o inhalar el producto accidentalmente. El contacto con la piel puede producir quemaduras.
Debemos tener el producto fuera del alcance de los niños, pues al ser inodora no se advierte peligro, lo mejor es tenerla en lugar seco y limpio lejos de productos de tipo ácido. Por si fuera poco, puede reaccionar violentamente al contacto con agua y ácidos y, en contacto con determinados metales, produce hidrógeno, que es inflamable y explosivo.
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